Rosa Amelia


No te diré qué usar, te preguntaré: ¿Cómo te quieres sentir?

“Nadie en el mundo debe decirte qué puedes o no vestir teniendo como referente tu tipo de cuerpo, ni tu Asesor de Imagen” – Mira Adentro, despierta y brilla

Hola hermosa, gracias a tu preferencia y a la votación que realizamos durante la semana en redes sociales, Morfología Corporal se extiende a una segunda entrega y formará parte de una trilogía.  Así que atentisima para no perderte la próxima semana el artículo que cerrará este tema tan controversial y que últimamente nos está trayendo dolores de cabeza.

¿Cuántas revistas de moda has leído con titulares que de forma imperativa te dicen qué es lo que debes vestir si tienes tal o cual tipo de cuerpo?

¿No eres de revistas?, ok, ¿cuántas cuentas en redes sociales te has encontrado de “expertos de moda” diciéndote que debes usar y qué no, por determinadas características físicas?, ¿programas de televisión nacionales o extranjeros?.  Hoy te cuento un poco cómo nace esta idea que algunos Asesores de Imagen contemporáneos continúan implementando en sus clientes al pie de la letra, guiados por sus emblemáticas estrellas…

Reino Unido, 2001, nace el programa “What Not to wear” (¡No te lo pongas! – en español), era un reality show presentado por Trinny Woodall y Susannah Constantine. Posteriormente, en el año 2006, el programa empezó a ser conducido por Lisa Butcher y Mica Paris.  Estados Unidos no se quedó atrás y en el año 2003 Clinton Kelly y Stacy London empezaron la conducción de una serie que fue grabada en 10 temporadas y de la que estoy segura, TODOS tenemos recuerdos.

¿De qué trataba exactamente?

Dos expertos en moda junto al reconocido estilista Ted Gibson y la maquilladora Carmindy tenían como misión transformar el aspecto físico del participante en turno.  Ofrecían una tarjeta de crédito con una cifra alrededor de los $5,000.= para que pudiese comprar prendas nuevas, e invirtiera en un nuevo guardarropa y a su vez en un cambio de estilo.

¡Que bien suena eso!

¡No señoras!, “siempre hay que leer las letras pequeñas…” o en este caso, poner en una balanza qué tanto estás dispuesto a aceptar como regla de 2 completos extraños a cambio de “tantas bondades”, pues, aquí te lo recuerdo: 

1.- Debían deshacerse de cada prenda de su guardarropa antiguo, si por mala suerte a sus 2 flamantes asesores no les gustaba lo que veían. Sin piedad, sin miramientos, sin importarles si al participante le traía recuerdos, aprecio emocional, se sentía cómodo o feliz. Simplemente se irían a la basura.

2.- Seguir al pie de la letra los cambios que los expertos les indicaran. Si proponían corte de cabello, se cortaban el cabello. Si proponían tacos del número 10, pues caminando como flamencos tenían las mujeres que terminar la serie. Que si la ropa multicolor era lo que tocaba, pues ponte todo encima y sal así por las calles.

Nunca se respetó la opinión del participante, y con esa serie crecimos muchos amantes de la moda y de la imagen. Con esos referentes como expertos de lo que se supone está bien.  Pero como en todo, crecemos y decidimos que adoptamos de los pioneros y que definitivamente dejamos ir y sólo recordamos en momentos como estos en los que quiero contarte un poco el por qué mucha gente aún le tiene rechazo a mi profesión.

¿Todos los Asesores de Imagen son así?

Pues no. Como en toda profesión hay de todo. Hay los que se especializan en moda y tendencias, otros que combinan una primera carrera con Imagen Personal o Empresarial, pudiendo ser Coaching, Psicología, Comunicaciones, Marketing, Nutrición y así un sin fin de profesiones afines.  En este punto quiero ser completamente honesta contigo, aún existen los que llenan sus redes sociales criticando el cuerpo de los demás o las elecciones de diferentes figuras públicas y hasta tienen secuencias en las que se autodenominan: “Críticos de Moda”.

Por mi parte, siempre he pensado que si no tienes nada positivo que decir, mejor no digas nada.  ¿Quién carambas tiene derecho de opinar sobre lo que se pone otra persona porque la teoría dice que determinado cuerpo se ve mejor con tal o cual otra prenda?

Hay 3 cosas que debes saber antes de solicitar una Asesoría de Imagen:

1.- ¿Qué es lo que quieres conseguir con un cambio de Imagen?

Me encanta que puedas hacerte estas preguntas antes de iniciar una o varias sesiones con el Asesor de Imagen que decidas contratar. Tienes que estar muy clara de los motivos por los cuales te acercas a pedir asesoría a un profesional.  Puede ser que los motivos que te lleven a contratar uno sea un ascenso laboral, un cambio de trabajo, inicias un nuevo emprendimiento y como imagen de tu propia marca necesitas darle armonía a tu mensaje, tal vez atraviesas por un cambio de estado civil, esos me encantan, son mis favoritos. 

Las mujeres que llegan a mi por una separación siempre esconden detrás de un cambio de imagen la necesidad de sentirse nuevamente hermosas. Lo que no saben es que ese poder no lo tengo yo, siempre está dentro de ellas, lo que yo hago es dar una limpiadita a sus lentes para que puedan verse como yo las veo cuando las conozco.

Sea cual sea el motivo, tenlo claro antes de contratar un profesional.  De esa manera tu tipo de cuerpo servirá como un referente para conseguir vestirlo acorde a tus objetivos, mas no como una limitante.

2.- ¿Cómo te quieres sentir al finalizar una Asesoría de Imagen?

Eso que guardas en tu corazón y que no se lo dices a muchos, eso vas a tener que compartirlo con tu asesor. Así que mi sugerencia es que busques a uno con quien te sientas súper en confianza y que te provoque contarle tus más grandes anhelos.  Esa será la mejor manera de que juntos trabajen para conseguir el resultado que aún sin saberlo ya lo estás buscando.

3.- Un cambio de imagen externo no podrá sostener una autoestima débil.

Siempre dejo lo más bonito para el final.  Si crees que un cambio de imagen externo es la solución para tus problemas, estás equivocada.  El cambio de imagen externo por sí solo, funciona como la carroza de Cenicienta, a medianoche se convierte en calabaza.  Es por eso que quiero que sepas que un corte de cabello, maquillaje y nuevo guardarropa no harán el trabajo que tú debes hacer contigo misma.

Cambiarte cada mañana con ropa limpia y que te encante, por supuesto que eleva endorfinas. Basta con mirarte al espejo y gustarte lo que ves hace que sonrías y la sonrisa envía un mensaje a tu cerebro de felicidad y en ese estado te mantienes.  Pero ¿qué sucede cuando no traes el cabello cepillado o no te maquillaste o te quitaste la ropa nueva?.  Es allí donde quiero que te detengas y que no le entregues todo el poder a un cambio de Imagen.

Te quiero fuerte, te quiero sana, te quiero ver brillar y para eso he diseñado una Guía Práctica para que reconectes con tu autoestima y amor propio y la puedes descargar de forma gratuita aquí: https://rosaameliaalvarado.com/

Son 10 días para que trabajes contigo y te aseguro que si le das la importancia que tiene, al cabo de 10 días vas a sentirte mucho mejor en todos los aspectos. Mis mentoreadas dan fe de ello, yo doy fe de ello jajaja. Es una guía que trabajo en mis sesiones de Acompañamiento One to One, pero que sin necesidad de que yo esté al otro lado guiándote, puedes empezar tú misma desde hoy.

Confío en que si sientes que te falta un cachito para convertirte en esa mujer poderosa que se que vive dentro de tí, harás la tarea y me contarás tus resultados.

Nos vemos por aquí el próximo viernes y por mis redes sociales cada día te doy los buenos días.

¡Te Amo!

Rosa Amelia 🙂


Rosa Amelia


AMOR PROPIO: 5 Herramientas que me han ayudado a ponerme a mí primero

  “No podemos dar absolutamente nada que no llevemos dentro”

Dicen que uno se vuelve experta en lo que le costó trabajo aprender y que a raíz de allí, encuentra su misión de vida y la pone al servicio de los demás.  Miro atrás y veo una mujer que durante muchos años creyó que para ser feliz debía cumplir con estándares sociales y de belleza que aprendió en algún momento de su juventud temprana.

Afortunadamente la vida, que es tan generosa, se encarga de enviarnos señales a cada momento, para hacernos saber que ese no es el camino.  Aquí el problema fue, que ésta ariana terca no quiso leerlas y que aunque sabía que habían “migajitas” que me estaban alertando en el camino, pues las pasaba por alto y las miraba muy por sobre el hombro.

Si tienes buena posición económica, vives en un lugar lindo, tienes un guardarropa que no cabe en 1 solo cuarto, has culminado 2 carreras, nunca has tenido problemas de corazón roto porque te ves tan bien por fuera que recibes muchas invitaciones y te ves dentro de una familia tradicional, llegas a creer que eres feliz. Que amas tu vida y que te amas a tí.  ¿Por qué sucede eso?  Porque crecimos creyendo que eso es felicidad.  Que salir del colegio y graduarte en una carrera “exitosa” te hace tener la mitad de la vida resuelta.  Con los triunfos académicos llegan las felicitaciones, la admiración y el respeto de tus amigos y familiares, se te abren muchas puertas, no sólo laborales sino también en cuanto a relaciones sociales, y tú sigues creyendo que eres feliz.  

No te puedo entregar un manual con las aristas exactas de todas las alertas que existen para que te des cuenta que no te estás amando como deberías, lo que sí puedo hacer es contarte desde mi experiencia cuáles fueron las que pude reconocer y que me ayudaron a darme cuenta que no me amaba como creía, si te reconoces en alguna, sigue leyendo, porque hoy te enseño 5 herramientas fundamentales que aprendí y que aplico el día de hoy para no olvidarme de ponerme primero cada día de mi vida.

1.- Si te ves complaciendo a familiares, amigos o parejas de forma constante porque prefieres verlos felices a ellos, antes que a tí, evalúa dónde está el punto medio entre hacerlo porque se siente bien entregar al otro y hacerlo porque consideras que su felicidad es más importante que la tuya.  Encuentra el balance para que al momento de dar, te sientas feliz por el otro pero que ese “entregar” no sea motivado por tu ego haciéndote creer que eres la salvadora.

2.- Si no puedes decir NO a invitaciones porque te da “pena” cómo se va a sentir el otro y terminas yendo a lugares o en compañía de alguien con quien no te sientes a gusto, definitivamente no te estás amando.  Aquí estuve en muchas oportunidades.  Estuve frisandome en partidos de fútbol una y otra y otra vez porque no tenía corazón para decirles: “Me aburro, me da frío, tengo sueño”.  Ahora que lo recuerdo me da risa, y hasta con ternurilla veo a esa mujer en chaqueta deportiva y zapatillas alentando al equipo vencedor.  Hoy le diría a mi pareja con toda la honestidad del mundo: “Te Amo, puedo irte a ver 1 vez al mes, tal vez 2, tú a lo tuyo, yo a lo mío y cuando terminemos, nos juntamos”. 

  • Bonus para las veces que presté mi departamento porque mi mejor amiga (en aquella época) quería beber con su pareja y que yo estuviera para hacer reunioncitas de a 4.  (Esa imagen aún no me da ternurilla, miro atrás y quiero zamaquear a esa Rosa)

3.- Si dejas de comer porque crees que estás gorda y que no existe felicidad con sobrepeso.  No te estás amando.  Aquí quiero dejar en claro que no estoy apoyando una vida sedentaria y de sobrepeso.  Lo que promuevo hoy es una dieta balanceada cero restrictiva, donde la premisa sea ser saludable, no delgada. Que entiendas que la decisión de entrenar, es por salud, por diversión, porque el deporte que elijas llene tu espíritu, no que vayas a hacer deporte como un medio para conseguir delgadez a pesar de que no fuera de tu agrado.  

En mi caso, siempre he amado el gimnasio, desde antes de ser mamá ya cargaba pesas. Incluso me enteré que estaba embarazada yendo con bastante regularidad al gimnasio.  Pero se que mi constancia a los 19 y 20 años no pasaba por entender que el deporte era bueno para mi salud.  Lo hacía porque sabía que entrenando se me veía muy bien y sí, claro, además, me gustaba.  Hoy entreno con regularidad pero ya no por esa necesidad de verme físicamente bien, sino con la certeza de tener un corazón sano y que como resultado cada vez me puedo ver mejor.  La talla que usas no define tu belleza.

Esas son las principales señales que yo viví una y otra vez. Y que hoy comparto contigo para que las evalúes. Tú puedes reconocerte en alguna, en las 3 o en ninguna.  Si estás pasando por alguna etapa en tu vida donde ya no te hayas, donde te das cuenta que no eres feliz o donde sientes que vas por un rumbo que ya no te pertenece, siempre puede girar el timón, detenerte y evaluar hacia dónde quieres ir y para qué.

Quiero detallarte 5 Herramientas que puse en práctica para salir de ese ciclo donde creía que complaciendo a los demás era feliz.  No espero que creas lo que escribo, pero sí puedes darme el beneficio de la duda y si algo de lo que te comparto a continuación suena nuevo para tí, te invito a que lo recojas y  lo incorpores, y luego me cuentas 🙂

1.- Autoconocimiento:  Si me sigues en mis redes sociales, me imagino que ya te debo tener seca con el tema.  Al menos 1 vez por semana lo  menciono.  Pero es que para mí es el pilar fundamental de TODO. Saber qué te gusta y que no son el mejor regalo que puedes darte a tí misma.  Creo firmemente que una mujer que se da la oportunidad de conocerse es invencible. 

Aquí puedes oír una nota de voz referente al tema: ://www.instagram.com/p/B_NyRfWDi0Y/?utm_source=ig_web_copy_link

  • Conocer tu mente: cuáles son tus fortalezas, tus talentos, tus dones.
  • Conocer tu espíritu: ¿en qué crees?, reconocer que somos parte de un todo.
  • Conocer tus emociones: aceptar que somos luz pero que también tenemos oscuridad y a partir de allí comprometernos a transformarla. Nada que no reconozcas como tuyo podrá mejorar. 
  • Conocer tu cuerpo físico: reconocer el regalo que nos dio la naturaleza de haber nacido siendo mujeres y tomarnos el tiempo de entender nuestro ciclo menstrual, por qué llega, para qué y decidir cómo lo usamos así como nuestra sexualidad. Ambos son regalos que no siempre vemos.

2.- Autoaceptación:  Eres perfecta en el cuerpo físico en el que has nacido. El color de tu cabello, de tus ojos, de tu piel tiene una armonía perfecta.  Mientras más rápido lo reconozcas, más rápido podrás pasar al siguiente nivel y aprender a vestir tu cuerpo de forma inteligente.  No busques ser un modelo diferente al tuyo.  Tú eres hermosa tal y como eres.  

“Preocúpate de arreglar tu jardín para que no estés mirando el jardín del vecino”. Aquí puedes oír una nota de voz referente al tema:
https://www.instagram.com/p/B-XL-qPDt5p/?utm_source=ig_web_copy_link

  • Un tip que puedo darte y que he notado con eficacia que funciona con mis asesoradas es pararnos frente al espejo cada día durante unos minutos a contemplar nuestro cuerpo desnudo y cada día procurar encontrar diferente belleza.  Al principio puede parecerte tonto, pero de que funciona, funciona.  Yo no me voy del espejo hasta antes decirle a mi cabello lo hermoso que es.  Amo su color, amo su textura, amo el largo y amo lo abundante que es. Le agradezco crecer fuerte y sano y eso hace que siga creciendo 🙂

Te invito a practicarlo y ver más allá de si estás gorda, o muy flaca o eres pequeña o demasiado alta.  Basta de hablarle feo a tu cuerpo.  Reconócelo como un todo, agradécele que funcione perfectamente y admira tu belleza.

3.- Respeto por tí mismo: Tener claridad acerca de qué es lo que vas a permitir en todas las áreas de tu vida.  Para ésto tengo un lema bien claro.  Te lo comparto y espero que te sirva como a mí.

“Decidir antes de tener que decidir”.

Te doy un ejemplo claro para dejarme entender: Yo tengo decidido que si alguna vez un hombre comete agresión contra mi persona, no habrá justificación que yo perdone.  Es algo que tengo claro desde pequeña.  Creo que nada justifica la agresión y que si sucede es porque no me respeta.  

Con éste ejemplo no te estoy diciendo que tú debes imitar mis reglas, no.  Tú debes trabajar en las tuyas y tener decididas muchas cosas antes de tener que decir, así, de esa manera si llegaran a presentarse, pues no tendrás dudas acerca de qué hacer porque ya lo tienes decidido. Sabes dónde sí y dónde no.

No tengo permitido que alguien me busque y empiece a quejarse de algo delante de mí. Soy anti quejas. Puedo oír tus propósitos de mejoras. Pero las quejas no te llevan a nada y exijo que respetes mi mente. La queja me parece ofensiva.  Tengo bastante educando a mi mente contra la queja como para permitirle a otro que se queje en mi presencia.

4.- Autocuidado:  Sin excusas, sin pretextos.  Seas mamá de niños pequeños o tengas demasiado trabajo. Podrás darte 15 minutos al día para cuidar de tí.  Si no eres capaz de designar para tí 15 minutos al día, que no te extrañe que aparezca la depresión, la angustia, la ansiedad. ¿Cómo podrás criar niños felices si tu vida es infeliz?  Si estás en ésta última y al leerme piensas: “Que fácil es para tí escribirlo, tu hijo es adulto” pues te digo que más fácil hubiera sido darme esos 15 minutos cuando él estuvo pequeño para mí y no ingresar reiteradas veces al hospital por no saber manejar mis emociones queriendo ser la mejor esposa, la mejor madre y poniéndome a mí hasta el final de la lista con tal de saber que ellos eran felices.

Encuentra ese “algo” que te conecte con tu felicidad interior y simplemente hazlo.  Tus hijos podrán vivir sin esos 15 minutos para tí.  No es egoísmo, es salud para tí.

5.- Ama tu soledad: ¡Bendita soledad!, ¿Sabes qué pasa con la soledad?, que está muy mal vista.  La han estigmatizado como el castigo para los seres despiadados. “Te vas a quedar sóla como no tengas hijos”……………

……….. (allí incluyo muchos puntos suspensivos porque es de las peores que he oído)….

No por ser mujer tienes que ser mamá.  Ser mamá implica mucho sacrificio.  Mucho amor también, pero son muchos años de tu vida los que dedicas al cuidado de un pequeño.  No te embaraces por tenerle miedo a envejecer sola. Un hijo no es garantía de compañía futura, al igual que no lo es un marido.  

Levante la mano quien no es feliz con su pareja pero no lo deja esperando que llegue “algo” mejor. ¡Cuando llegue alguien más, allí si Rosa Amelia, dejo a Pepe, te lo juro!, si tuviera 1 centavo por cada vez que escucho esa canción…tendría al menos para financiar mi 1er libro jajajaaja. Cansadas me tienen con eso….si tú eres una de ellas, por favor, deja de mentirte. Y lo peor es que si en verdad esperas que llegue alguien más, porque crees que va a llegar mientras tienes ocupada esa área de tu vida.  Olvídalo, no funciona así, primero deja espacio en tu vida y espera a que la vida te sorprenda. No es al revés.

Aquí en especial puedo contarte que una vez que me amigué de mi soledad me di cuenta que nunca he estado sola.  Siempre me tuve a mí, pero no me conocía.  Conocerme ha sido el mejor regalo que me he dado, hoy disfruto tanto de estar conmigo que puedo beber un café en un restaurante sola solita sola porque no me siento así, siempre me siento acompañada de mi mejor amiga, de mí misma.

Si vieran las miradas de pena que siento de la gente cuando me ven entrar al cine sóla y yo sólo puedo pensar: Cuánta gente como zombies dormidos sintiendo pena por mí cuando en realidad lo que no saben es que me escapo sóla antes de que alguien se me apunte jajaja, yo quiero ir sola y que nadie me hable.  Hay películas que quiero ver acompañadas, pero otras que me place demasiado ir sólo conmigo.

Nunca fuiste sola al cine, inténtalo, ¡te va a gustar!

Hasta aquí llega nuestra entrada de los viernes, que sepas que éste camino no es para cobardes.  Que debes ser muy valiente para renunciar a lo conocido, y decidir descubrir que hay más allá de tu zona de confort y de tus miedos.  Pero, ¿Sabes?, vale completamente la alegría. Hoy puedo decirte con toda la sinceridad y sin riesgo a equivocarme que vivo la mejor etapa de mi vida. Despierto cada día con la ilusión de llevarme el día por delante, estoy enfocada 100% a mi pasión, escribir, comunicar, atender a mis clientas, disfrutar de la compañía de mi hijo y de mis familiares.  Reunirme con los pocos amigos que he decidido conservar en mi vida.  No tengo pareja hace varios años por decisión y pretendo seguir conmigo misma algunos años más.  (Te cuento que no lo descarto definitivamente, pero por ahora, me siento muy feliz conmigo y no me quiero compartir con nadie).

Con todo mi amor, Rosa Amelia 


Rosa Amelia


¿Qué es ser un Asesor de Imagen?

No hay reunión social a la que asista, en la que por lo menos de 2 a 3 personas que no conozca, me pregunten luego de habernos presentado: ¿Qué es un Asesor de Imagen?.  En el mejor de los casos, no ignoran por completo el tema, sino que se aventuran a decirme: “Oh, que interesante, a mi siempre me ha gustado la moda”.  

Debo confesarte que al principio renegaba.  Había mucha desinformación del tema y creo que aún la hay.  Es por eso que a nosotras, las Asesoras de Imagen, es a quienes nos toca explicarles al mayor número de interesados posibles que si bien es cierto, estamos al tanto de las tendencias, la moda y el color que cada año lanza Pantone, no es sólo eso lo que conoce un Asesor de Imagen. 

Vamos por el principio. La página oficial de AICI (Association of Image Consultants), nos dice lo siguiente: 

“Un Asesor de Imagen es un profesional que brinda servicios para individuos y corporaciones a través de coaching, presentaciones, seminarios y talleres. Los Asesores de Imagen ofrecen asistencia en la mejora de la imagen (apariencia, análisis del cuerpo y color, desarrollo de vestuario y administración), comunicaciones sólidas y efectivas, etiqueta comercial y social, cortesía, marca y más, todo a través del entrenamiento y la capacitación.”

Con ese concepto como base, te puedo decir bajo mi experiencia, que un Asesor de Imagen es eso y mucho más.  

Éste año cumplí 6 años desde que me gradué como Asesora de Imagen y Personal Shopper Internacional, pero 10 desde que atiendo a diferentes clientas asesorándolas en la construcción de sus guardarropas y 22 años desde que atendí por primera vez a una clienta en una boutique de mi ciudad. Tenía 17 años cuando me animé a no dejar pasar mis vacaciones universitarias sin hacer algo más productivo y emocionante con mi tiempo libre.   Vaya que a la fecha “ha corrido mucha agua bajo el puente”.

Durante todos éstos años nunca he dejado de estudiar, me he ido formando en diversas materias y he atendido a infinidad de mujeres en mi departamento, ya que esa fue la manera que encontré de poder hacer lo que me encanta mientras compartía las 3 comidas principales con mi hijo y supervisaba sus tareas escolares.  Hoy es un muchachote, y ya no me necesita 24 horas con él, pero sigo eligiendo atender de forma muy personalizada en mi departamento a todas mis clientas.  

Un buen Asesor de Imagen no sólo sabe la teoría que le enseñan en la escuela donde elija cursar la carrera.  Nosotros trabajamos con diferentes hombres y mujeres y esa diversidad cultural y social de cada uno debe ser recibida con la mayor empatía que merecen.  

Para que cualquiera de nuestros servicios sea aprovechado en plenitud, un buen Asesor de Imagen trabaja primero la confianza que debe existir con el cliente.  Tenemos en cuenta que nos estás confiando tu más preciado tesoro.  Tu intimidad, tu imagen y la circunstancia por la que estés pasando en tu vida y por la que has llegado hasta nosotros.  La Asesoría de Imagen va más allá de enseñarte cómo vestir tu cuerpo físico de acuerdo a las herramientas que conocemos para potenciar aquellas áreas de tu cuerpo que más te gustan, te ayudamos a reconocer tus puntos más fuertes, tus habilidades y virtudes y todo aquello que te hace único y diferente de los demás.  Buscando como finalidad que te sientas fuerte y poderoso desde adentro y que tu bienestar interior se vea reflejado en tu exterior para que logres los objetivos que te hayas trazado a nivel personal y laboral al momento de nuestras asesorías.  Y hago énfasis en “al momento de nuestras asesorías” ya que la vida no es estática y los objetivos que tienes a los 20 años no serán los mismos que a los 30, ni a los 40 y en adelante.  Evolucionamos con los años al igual que nuestros gustos y estilo.

Es por  todo lo mencionado, que al inicio te decía que ser un buen Asesor de Imagen va más allá de haber cursado la carrera.  Digamos que es apenas el 25% que debemos tener como trayectoria para poder ofrecer un buen servicio a nuestros clientes.

Hoy no te hablaré de los cursos y materias en las que todos los Asesores de Imagen nos debemos formar o por lo menos coquetear.  Hoy quiero hablarte de esas habilidades y cualidades que sumamos para que te lleves la mejor experiencia.

Capacidad de Servicio:

Alguna vez leí: “Si no vives para servir, no sirves para vivir”.  Es una frase que se lee dura pero lleva razón. Nuestra carrera se ejerce por vocación. Amamos transformar vidas. Que a partir de nuestros servicios veas que tu vida no vuelve a ser la misma, que veas tu mundo con más optimismo, fortaleza y seguridad.

Capacidad de Comunicación:

¿De qué le serviría al mejor Asesor de Imagen haber leído todos los libros del mundo si no encuentra la forma correcta de expresarse y comunicarse en el entorno que le toque desarrollarse?  Ya sea en una clase, en una exposición, con un grupo pequeño o grande de alumnos, en una asesoría personalizada o siendo el ponente en una charla, tener el don de la palabra o haberse cultivado en ella es sumamente importante. Ojo, no basta con saber escribir. Tenemos buen dominio del lenguaje, tono de voz y el correcto manejo del lenguaje corporal (no verbal).

Capacidad de resolución de problemas:

No hay nada que no podamos mejorar y ese es nuestro mantra.  Muchas veces los clientes llegan sumergidos en crisis emocionales por aspectos de su físico que a nuestros ojos son perfectamente mejorables. Debes saber que para eso nos hemos formado.  Si en nuestras manos no está la solución, creeme que juntos la vamos a encontrar.  

Somos empáticos:

No llegamos a  tu casa y botamos todo lo que creemos que no sirve.  ¡En lo absoluto!, eso descartalo por favor. Somos respetuosos de tus gustos, y sobre eso trabajamos. Tus recuerdos se quedan contigo pero si pondremos manos a la obra en ayudarte a que vivas el presente y sueltes apegos que ya no te representan en la actualidad. Tú tienes la última palabra SIEMPRE.

Actitud Positiva:

En nosotros siempre encontrarás palabras de aliento.  Todo se puede mejorar. Todo lo vamos a alcanzar. Tus metas son las nuestras. No queremos atenderte y perderte el rastro. Por lo general un asesorado se convierte en parte de nuestra historia.  Siempre estaremos felices de saber de tus logros.

Eficacia:

Somos muy claros desde el inicio.  No queremos venderte aire ni falsas promesas.  Sabemos desde la primera sesión que terreno pisamos y armamos una hoja de ruta a seguir de acuerdo a tus necesidades.  Llevamos una bitácora, respetamos tus tiempos y respetamos el nuestro.

Responsabilidad:

Honramos nuestros compromisos, nuestras citas, nuestros eventos.  Cuidamos nuestra imagen desde muchas aristas. Ser responsables es la madre de ella.  No recomedamos productos sin haberlos probado y aprobado antes. Muchas veces trabajamos de la mano con especialistas de rubros afines a nuestra profesión para poder darle al cliente, ya sea particular o alguna empresa, el mejor kit integral.  

Confidencialidad y Discreción:

No revelamos tu nombre ni mucho menos el servicio que tomaste con nosotros. Pero por lo general son los clientes los que al quedar tan felices con nuestro trabajo, se convierten en nuestra mejor red de marketing y publicidad.  Amamos cuando nos envían correos o mensajes diciendo lo bien que se sienten luego de nuestras asesorías.

Tenemos experiencia de vida:

La mayoría hemos viajado a diferentes países fuera de nuestra ciudad natal.  Nuestro espíritu es aventurero y no sabe quedarse quieto. Esa es una de las razones por las que escogimos ésta profesión.  Viajar nos abre la visión a otras culturas y nos maximiza la razón. Nos convierte en personas más sencibles y empáticas. Comprendemos que nada es malo o bueno.  Sólo hemos crecido en diferentes culturas. Leemos mucho, nos formamos constantemente ya que de no ser así, no podríamos estar al tanto de lo que ofrece el mundo para poder mostrarselos a ustedes.

Desarrollo Personal:

Ya sea por formaciones con profesionales o por cuenta propia, ésta es una arista que se lleva implícita.  Los buenos Asesores de Imagen estamos en ésta búsqueda constante. En caminar hacia un mejor yo y un mejor estado de conciencia. Si no nos hemos ayudado a nosotros primero, no podríamos ayudar a nuestros clientes.

Finalmente, luego de ésta corta explicación, me parece que ya estás lista para decir que ya sabes lo que hace un buen Asesor de Imagen, y si todavía tienes dudas, sigue por aquí que me encantará que sigamos aprendiendo juntas.

Con amor, Rosa Amelia.