
Un gran porcentaje de mujeres que llegan a mi consulta, lo hacen pidiéndome un cambio de imagen. Cuando escucho o leo esa frase, se de inmediato que atraviesa por una etapa diferente en su vida y que no me va a costar mucho trabajo ni tiempo llegar hasta allí. Tengo un olfato para esos temas…no se si es por la intuición tan desarrollada herencia de mi abuela materna o es por el cúmulo de años que tengo acompañando a mujeres de diferentes edades y el factor común siempre es cambio de vida – cambio de imagen.
Como Asesora de Imagen especialista en desarrollo personal no puedo permitirme acceder a cambiar el mundo externo de mi clienta en 1 sesión. Y así se los hago saber. Desde un inicio les explico que mi forma de trabajo es muy diferente. En 1 sesión podemos perfectamente definir tu estilo o encontrar tu paleta de colores, podemos también evaluar la forma de tu cuerpo y ver el tipo de rostro que tienes. En 1 sesión podemos hacer mucho por tu imagen. Pero de ninguna manera te expondría a un cambio de imagen radical si antes no has pasado por un proceso de aceptación y de amor hacia tí misma.
Entonces, ¿Cómo sé si necesito un Asesoramiento de Imagen?
Primero quiero que te asegures que la decisión de consultar con un Asesor de Imagen es única y exclusivamente tuya. Sólo tú puedes decidir sobre tu cuerpo y los cambios que harás con él.
No necesitas un Asesoramiento de Imagen si:
- Buscas agradar a otra persona cumpliendo sus expectativas antes que las tuyas.
- Buscas resultados rápidos aunque eso represente que no sean sostenibles en el tiempo. No uso la fórmula del hada madrina de cenicienta. Me gusta conservar la magia después de las 12.
- Ves las sesiones como una pérdida de tiempo. Lo tuyo es 2 horas, que te digan que usar, hacer y decir en tus reuniones y punto. (Para eso puedes consultar un servicio express y ser específica con la necesidad en concreto)
- Buscas vestir “a la moda”. Si éste es tu caso, sólo debes invertir en 2 buenas revistas o googlear PRENDAS DE MODA 2020 y navegar por internet.
Es una excelente idea si:
- Llevas mucho tiempo usando sólo 2 o 3 outfits de todo lo que tienes en tu armario. Son esas piezas que lavas, secas y vuelves a usar. Te sientes cómoda en esa zona de confort conocida y eso impide que eches un vistazo a todo lo que has acumulado.
- Haz comprado mucha ropa que no usas. No son de tu talla. Ni siquiera son de tu estilo pero el hecho de tenerlas contigo te da una falsa tranquilidad porque te engañas diciendo que algún día la usarás.
- Abres tu guardarropa y aparte de no tener qué rayos ponerte, te paras frente a él y lo miras esperando que salga una mano mágica y te resuelva el dilema del día. Luego lo cierras y vuelves a usar uno de los 3 outfits de los que hablamos líneas arriba. (Veo como te ries, te dije que soy intuitiva)
- Algunas veces le atinas al color, tienes algunas prendas que te gustan, pero muchas otras no te quedan bien, te hacen ver más cansada, ojerosa o pálida. Eso es porque estás usando colores que no pertenecen a tu colorimetría personal.
- Llegaste a un punto en el que dejó de importarte que usar. Sabes que eres muy buena en tu trabajo y que no te van a despedir por como luces. Ya te cansaste de batallar cada mañana con tu imagen y optas por usar lo que te heredó tu mamá, te regaló tu prima, o que aunque luce viejo, te tapa completa y así pasas desapercibida.
- Acabas de dar a luz. Sufriste la pérdida de un familiar y tu peso bajó o subió. Cambiaste de país, de estatus civil, o eres sobreviviente de una enfermedad. Todas ellas son situaciones que liberan mayor cantidad de cortisol y debes comprender que eso ha generado cambios en tu cuerpo. Es momento de tenerle paciencia y tratarte con amor, es el mejor momento para acudir a un Asesor de Imagen y dejarte acompañar en el proceso de regreso a una vida feliz.
Las situaciones que te he descrito son sólo algunas de las muchas que considero más relevantes al momento de tomar la decisión de contratar un Asesor de Imagen. Y contarte también que si optas porque sea yo quien te acompañe, que sepas que soy muy honesta desde el principio. Te recomendaré qué servicio es el mejor para tí según la etapa de vida en la que te encuentras. No trabajo sóla. Tú y yo seremos un equipo. No trabajo sólo por dinero. Me gusta saber que contribuyo a la mágica secuencia de intercambio de dinero positivo.
Ahora sabes que no comulgo con los cambios extremos de un día para el otro. Para que un cambio sea sostenible en el tiempo, debemos mirar adentro y con convicción dar muchos pasos que nos lleven a resultados firmes teniendo como objetivo un guardarropa funcional a tu vida actual y a tu rutina diaria.
Te quiero sana, fuerte, equilibrada y feliz. Me encantará conocerte y servirte desde el amor en todo lo que pueda. Y si después de leerme, aún tienes dudas, escríbeme, déjame un comentario o mándame un privado y así podremos resolver todas tus dudas.
Jimena dice:
Luego de haber leido lo que tu haces creo que todos deberiamos tener un asesoramiento de imagen!!!!
Un cambio exterior que reflejo nuestro interior con el cual nos sintamos cómodas y felices porque si es una tortura er tu closet y no saber que ponerte.
Rosa Amelia Alvarado dice:
Buen día Jimenita, que alegría estar aportando con las entradas al Blog, que más mujeres validen mi profesión. Veo mis servicios como un aporte a la vida de cada mujer. Una vida más organizada se traduce en una vida más bonita y más feliz. Le das mejor utilidad a tu tiempo y te olvidas del dolor de cabeza de no saber que ponerte. Mi visión es que cada mujer que pase por mi vida tenga todas esas áreas resueltas. Gracias por leer y te invito a quedarte por aquí 🙂